Del 23 al 25 de agosto
participé en foro “One people One planet” realizado en
Louvain-la-Neuve y que por segundo año consecutivo reunió a
diversos actores de la sociedad como son: representantes de los
gobiernos locales, organizaciones de la sociedad civil, empresas
privadas, ciudadanos de diversas generaciones, miembros de la
comunidad universitaria, entre otros, a fin de establecer un espacio
participativo de discusión para desarrollar una visión de un mundo
inclusivo y sostenible.
Aclaración:
Antes de empezar deseo que se note que este análisis se realizó
tomando en cuenta el entorno empresarial de la sociedad belga y en
general europea, es posible que algunas de las ideas que propusimos
parezcan muy irreales o inaplicables para otras sociedades con una
cultura empresarial demasiado tradicional y/o sin mayores
motivaciones ambientales, sin embargo considero que de todas formas
el modelo que proponemos en diferente medida puede ser poco a poco
implementado y adaptado a diversos casos.
Hacia un Modelo Empresarial Responsable
La
idea de los participantes del taller “Empresas” fue de determinar
las principales líneas de acción para alcanzar un modelo
empresarial que sea coherente con los nuevos paradigmas de desarrollo
sostenible en el que se tomen en cuenta tres ejes fundamentales: la
preservación de naturaleza, la economía responsable y la sociedad
solidaria.
Establecimos
cuatro líneas básicas a implementar en una empresa que se oriente
hacia la sostenibilidad:
Redefinir la misión y los objetivos de la empresa.
Aquí
nos cuestionamos si el objetivo principal de la empresa debe ser
solamente la maximización del beneficio, observamos ejemplos de
empresas en las que mas bien se prioriza la perennidad de su actividad
como objetivo principal, también se consideró la contribución
social y ambiental positiva. En este último aspecto se incluye la
realización personal por medio del trabajo, creando, desarrollando y
ofreciendo productos y servicios bajo nuevos modelos de negocios en
los que se ofrezca calidad, accesibilidad, se estimule la
responsabilidad de cada uno sin crear dependencia, se garantice la
dignidad humana en su proceso productivo y se contribuya con el
equilibrio eco-sistémico. Se evidenció también la necesidad de adoptar nuevos indicadores de rendimiento que consideren los tres ejes del desarrollo sostenible.
Sin
embargo para esto hay que tomar en cuenta que no solo la empresa
tiene que hacer concesiones, por ejemplo: una de las acciones que
puede ser muy práctica y directa para establecer este comportamiento
responsable es el pago del precio justo por la materia prima utilizada
para la fabricación de un producto, esto implica considerar también
el costo ambiental del uso y renovación del recurso, por tanto este
precio justo con el planeta se verá también reflejado en el precio
del consumidor; podemos notar que es difícil llegar a balances
completamente convenientes para todas las partes, pero lo importante
es tomar en cuenta todas estas acciones con el fin de alcanzar un
modelo empresarial más responsable.
Desarrollar un nuevo modelo de liderazgo.
El
nuevo líder debe comprometerse con los problemas
sociales, económicos y ambientales, para esto debe ser muy abierto a
la participación y diálogo tanto al interior como al exterior de la
organización. Se considera que un líder que desee aplicar este
nuevo modelo en una organización debe ser capaz de cuestionase, de
tener una visión crítica de si mismo, así podrá favorecer la
creación de un ambiente de trabajo que respete la equivalencia de
cada uno de sus colaboradores, promueva el desarrollo personal de
cada uno y permita la autonomía. En resumen el nuevo liderazgo es
un liderazgo en el que la participación en iguales condiciones sea
importante pero no solo de forma pasiva, es decir la idea es llegar a
un liderazgo colaborativo.
Compartir el poder y estimular la autonomía y la libertad.
Si
queremos implementar un modelo empresarial más inclusivo y solidario
se debe aprender primero a compartir el poder, este aspecto
particularmente concierne a los cuadros directivos, pues son ellos
quienes deben delegar ciertas responsabilidades en sus subalternos,
esto permite que los empleados adquieran no solo responsabilidad sino
también experiencia que será de gran valor a largo plazo para la
organización misma. Para no caer en el caos cuando se comparta el
poder, es necesario formar al personal no solamente en las diversas
técnicas correspondientes a su cargo sino también en el triple
desafío del modelo empresarial que se desea implementar
(conservación del medio ambiente, economía responsable y sociedad
solidaria), igualmente es necesario estimular las iniciativas de
colaboración interna con la creación de grupos de trabajo
pluridisciplinario con objetivos multifactoriales.
Es
muy usual que las empresas evalúen el desempeño de sus empleados en
base a los objetivos anuales que se hayan planteado, así en la
evaluación anual el empleado puede ser acreedor de un bonus o
incluso de una promoción gracias a su rendimiento. Sin embargo en la
actualidad hay algunas empresas en las que se definen también
objetivos colectivos, los cuales son evaluados en base a indicadores
económicos, sociales y ambientales, el buen rendimiento en estos
objetivos ofrece un bonus para el grupo y no solo para el individuo,
se ha evidenciado que esta práctica permite que se instaure un
ambiente mucho más colaborativo que es de gran beneficio para la
organización pues se generan espacios de trabajo más creativos,
democráticos y conviviales.
Co-crear con todas las partes interesadas (empresarios, empleados, proveedores, distribuidores, consumidores, gobiernos, ciudadanos, ONGs, etc)
El
proceso de implementación del nuevo modelo empresarial requiere del
diálogo y colaboración entre la sociedad civil y la empresa. Se
debe incentivar el intercambio de expertos en diversas áreas que no
necesariamente son relacionadas con la actividad empresarial pero que
si tienen una alta importancia en la sociedad y que indirectamente
podrían afectar a la empresa, consideremos por ejemplo un tema de derechos
humanos en el que nos preguntaríamos si los proveedores
de la empresa ofrecen condiciones dignas de trabajo para sus
empleados.
Un
tema bastante delicado a nivel empresarial es el financiero, el nuevo
modelo considera la posibilidad de que la empresa pueda escoger sus
financistas, esto quiere decir que se deberá buscar más allá de la
banca tradicional, la idea es que se pueda garantizar que los fondos
utilizados por la empresa son éticos, es un trabajo sumamente
difícil, pero poco a poco debemos ir hacia esa tendencia.
Para
que el modelo pueda funcionar creemos que es fundamental la
información y para esto se considera que se debe priorizar la
promoción frente al lobbying, hay tres objetivos básicos a respetar
en el momento de informar, estos son: honestidad, búsqueda del bien
común y no velar por la protección del status quo sino por el
progreso en términos de sostenibilidad.
En
función de la transparencia que se desea presentar al consumidor es
muy importante que la empresa mantenga una política de trazabilidad
a fin de poder identificar el origen y las diferentes etapas del
proceso de producción/distribución del bien o servicio ofrecido.
Hoy en día hay muchas iniciativas empresariales en las que ejemplo
en su página web se puede observar la huella ecológica de sus
productos, la localización y condiciones de trabajo de sus
diferentes fábricas, las iniciativas en función de reducción de su
impacto ambiental, etc.
Es
fundamental ser coherente con el modelo que se está desarrollando,
si se dice que una empresa es responsable y comprometida con el
desarrollo sostenible, no se puede por ejemplo promover la política
del automóvil empresarial sino mas bien se debe apoyar las formas de
movilidad alternativa, otra acción que se puede fácilmente
implementar es el consumo de productos de comercio justo o
agricultura orgánica y/o local en las cafeterías de la empresa, y
así diversas acciones que estén en armonía con los tres ejes de
desarrollo sostenible para alcanzar ese mundo inclusivo y solidario
que se desea
Finalmente
y dado que este desafío de un modelo diferente de empresa implica en
mucho el cambio de comportamientos quisiera recordar una de las
frases que más me gustaron en este seminario-taller: “El
comprometernos con el desarrollo sostenible es un acto
de libertad individual,
pero si somos muchos los individuos que deseamos hacerlo el cambio de
modelo puede ser posible”.
Estas
conclusiones fueron realizadas gracias a un trabajo de reflexión
colectiva, por eso no quiero dejar de nombrar a aquellos que junto a
mi compartimos este proceso de análisis:
Sonia
Bonus, Carine Petit, Jacques Thoelen, Damien Dallemagne, Philippe
Delstanche, Emmanuel de Lutzel, Thierry Vandebroeck, Maïté Peeters,
Frédéric Triest, Emile Etienne y Laurent Ledoux.
En
los próximos meses saldrá la publicación de todas las reflexiones
del foro en su página web:
http://www.onepeople-oneplanet.be/index.php,
si les interesa podrían pasarse por ahí para revisarlas, de todas
formas cuando el documento esté listo yo informaré en este blog.